ESG: UNA PRIMERA APROXIMACIÓN A SUS FUNDAMENTOS

ESG: UNA PRIMERA APROXIMACIÓN A SUS FUNDAMENTOS

Las siglas ESG, que responden en inglés, a las palabras Enviromental, Social y Governance, en la práctica, hacen referencia a los factores que convierten a una empresa en sostenible a través de su compromiso social, ambiental y de buen gobierno, sin descuidar nunca los aspectos financieros.

El origen de este acrónimo se remonta a los inicios de la década de los 2000 y ha sido el resultado de la evolución de lo que se conocía como Inversión Socialmente Responsable (ISR). Pero va más allá de lo que conocíamos como ISR, ya que tiene un enfoque holístico de todos los procesos de una empresa, permitiendo ver el alcance del impacto que trasciende al negocio.

Actualmente los inversores, tanto los que aportan capital como los que financian con deuda, analizan cada vez más los compromisos de las empresas con los criterios ESG, antes de decidirse por invertir. Por tanto, ya no se trata de una moda, sino que es una realidad que muestra un cambio en la conducta de los inversores.

SIGNIFICADO

Enviromental: abarca el efecto que la actividad de las empresas tiene sobre el medioambiente, directa o indirectamente, como el cambio climático, pérdida de biodiversidad, escasez de agua o degradación de los suelos.

Social: incluye la repercusión que las actividades desarrolladas por las empresas tienen en la comunidad, como la desigualdad entre hombres y mujeres, la accesibilidad en los edificios, el crecimiento desigual, los derechos humanos o cuestiones de salud.

Governance: se refiere al Gobierno Corporativo de las empresas, como la composición y diversidad dentro de los consejos de administración, los códigos de conducta o los programas de anticorrupción.

ANTECEDENTES HISTÓRICOS

Como ocurre con la mayor parte de los productos financieros y criterios de inversión, su origen se encuentra en los Estados Unidos, posteriormente suele pasar al Reino Unido y finalmente a Europa y resto del mundo.

Así, en los años 60 los estudiantes norteamericanos empiezan a pedir en sus universidades que no inviertan en empresas militares. En los años 80 los Estados Unidos adoptan la Comprehensive Anti-Apartheid Act y se prohíben las inversiones en Suráfrica, y en los 90 ya se lanza el Dow Jones Sustainability Index, que introduce por primera vez criterios de sostenibilidad.

En los años 80 aparecen en el Reino Unido las primeras Instituciones de Inversión Colectiva socialmente responsables y en los años 90 se produce en la UE la liberalización del mercado de gas y electricidad, que constituye un elemento decisivo en el inicio de la regulación de los criterios ESG, posteriormente muy desarrollada por Directivas y Reglamentos, así como por la implementación de Principios y Objetivos liderados por la ONU.

En España existe una pluralidad de disposiciones que regulan estas materias. A título de ejemplo, se pueden citar (i) la Ley 11/2018 de Auditoría de Cuentas, en materia de información no financiera y diversidad, (ii) la Ley 7/2021 de Cambio Climático y Transición Energética y (iii) el Código de Buen Gobierno de la CNMV desde 2006, respecto de las Recomendaciones sobre Sostenibilidad y Aspectos Medioambientales y Sociales.

ENVIROMENTAL

Debido a la enorme casuística y regulación de los tres componentes de ESG, en este articulo solo se incluyen unas breves pinceladas descriptivas del componente Enviromental.

Uno de los objetivos principales que se persiguen es la reducción de la “Huella de Carbono”, que constituye el indicador ambiental que refleja la totalidad de los gases efecto invernadero emitidos por las actividades económicas.

Existen tres medidores de la “Huella de Carbono”, que incluyen las siguientes métricas:

  1. Scope 1: emisiones directas, es decir, las que provienen de fuentes propiedad de, o controladas por, la empresa, como el consumo de electricidad, gasoil o producidos por escapes de refrigerantes líquidos de aparatos de aire acondicionado.
  2. Scope 2: emisiones indirectas, generadas por el proveedor de energía contratado por la empresa, derivadas de sus compras de electricidad, vapor o refrigeración.
  3. Scope 3: emisiones que se producen como consecuencia de la actividad de la empresa, pero que no son de su propiedad ni están controladas por ella, como la electricidad consumida por sus arrendatarios, gestión y transporte de residuos, construcciones y rehabilitaciones, desplazamientos y viajes de trabajo, etc.

Por otra parte, existen también tres tipos de formas de descarbonización:

  1. Reducción, que consiste en la reducción de sus propias emisiones, e incluye también la financiación a otras empresas para que éstas reduzcan sus emisiones.
  2. Prevención, que consiste en la aportación de financiación a otra empresa, con el objetivo de que evite nuevas emisiones.
  3. Eliminación/Absorción, consiste en utilizar soluciones que permiten la absorción (eliminación) de CO2 de la atmósfera. Pueden ser soluciones naturales como plantar árboles que absorben el CO2, o soluciones tecnológicas que absorben el CO2 y lo almacenan o lo convierten en productos.

Por último, habría que resaltar que hay también tres tipos de estrategias o grados de descarbonización:

  1. Carbon Neutral: Enfocado solo en emisiones de CO2 (excluyendo otros tipos de emisiones de gases de efecto invernadero - GHG) e incluye las siguientes compensaciones: (i) Por Reducción, pagando a otras empresas para que reduzcan sus emisiones en nuestro beneficio; (ii) Por Prevención, utilizando fuentes de energía renovables que no produzcan dióxido de carbono, y (iii) Por Eliminación/Absorción, eliminando CO2 de la atmósfera mediante el plantado de árboles o soluciones tecnológicas que absorban y almacenen el 100% del CO2 emitido.
  2.  Climate Neutral: Enfocado en todo tipo de gases de efecto invernadero, e incluye las mismas compensaciones que las previstas en el apartado (a) anterior para Carbon Neutral.
  3. Net Zero Carbon: Enfocado también en todo tipo de gases de efecto invernadero. Su objetivo, sin embargo, es conseguir cero emisiones netas de carbono, compensando las emisiones liberadas a la atmósfera, con una cantidad igual de emisiones absorbidas.  Por tanto, la única compensación aceptable en esta categoría, es la de Eliminación/Absorción.

CONCLUSIÓN

Teniendo en cuenta la enorme trascendencia que tienen actualmente los requisitos ESG para las empresas e inversores y, ello unido a, la gran variedad de materias a las que afectan, su minucioso grado de desarrollo y los costes elevados de implementación de muchos de ellos, las empresas se ven obligadas a realizar unos estudios muy detallados para su implementación. Para ello, es recomendable contar con equipos de especialistas multidisciplinares, abarcando varias disciplinas legales, técnicas, medioambientales, regulatorias, etc. Estos equipos deberán colaborar con la empresa (i) en la definición de prioridades, teniendo muy presente su tamaño y sector en el que opera, y (ii) en la preparación de un presupuesto vinculado a un calendario de implementación. Además, estos planes o programas de actuación deberán ser revisados periódicamente, al afectar a unas materias sujetas a cambios constantes.