¿CÓMO PALIAR LOS EFECTOS DEL COVID-19 EN LAS CADENAS DE SUMINISTRO EN CUATRO PASOS?

El escenario ha cambiado, China ya no es el único gran foco en la disrupción de las cadenas de suministro. En realidad, los países más industrializados de la unión europea, España incluida, ya se encuentran en el epicentro del problema sanitario y en consecuencia de dicha disrupción. Por ejemplo, Seat paralizará su fábrica de Martorell cinco semanas, Inditex, Mango y Tendam ya han cerrado todas sus tiendas en España y mientras tanto la industria China empieza a reactivar su industria tras contener la pandemia.

Es decir, estamos ante un escenario muy dinámico y en el que presumiblemente todo seguirá cambiando a velocidad de vértigo. En este contexto, es necesario desarrollar una respuesta ágil y convincente para paliar, en la medida de lo posible, los efectos del coronavirus sobre el tejido industrial español. La mejor respuesta, por supuesto, sería aplicar los planes de contingencia ya planificados ante posibles disrupciones en las cadenas de suministro. No obstante, es muy posible que un gran número de compañías no dispongan de tal plan. Para estos casos, se recomienda empezar a trabajar lo antes posibles en 4 grandes iniciativas:

  1. Proteger el activo más valioso – las personas.

Asegurar el bienestar de los empleados es fundamental ya que estos son el alma máter de cualquier empresa. Por lo tanto, de la gestión que se realice sobre este valioso recurso dependerá el presente, pero sobre todo el futuro de las compañías.

En este contexto, la primera recomendación es obvia, seguir al pie de la letra los consejos sanitarios de las principales autoridades gubernamentales en términos de gestión de personas.

La segunda reflexión es que puede ser necesario repensar las prácticas de trabajo. Por ejemplo, teletrabajo para las tareas más administrativas y de gestión, creación de unidades aisladas de trabajo por turnos para las practicas más operativas, etc. Estas y otras medidas deben transcurrir en un ambiente de trabajo constante, tranquilo, con transparencia en los flujos de información y evidentemente con unas medidas de higiene reforzadas.

  1. Analizar e identificar posibles riesgos y debilidades de la actual cadena de suministro.

La compañía deberá analizar en detalle los riesgos asociados a tres elementos clave de la cadena de suministro en esta crisis; el aprovisionamiento, la demanda y los procesos internos.

En el ámbito de los aprovisionamientos es de especial interés evaluar el grado de dependencia por proveedor e identificar aquellos que son clave en las áreas afectadas por el Covid-19. Sobra decir que es recomendable mantener una comunicación fluida con los proveedores clave y si fuera necesario, obtener nuevas fuentes alternativas de suministro. Por otro lado, también es importante monitorizar la volatibilidad de precios de materias primas, revisar los plazos de entrega según origen destino, valorar los riegos de los diferentes medios de transporte y anticipar restricciones aduaneras.

El segundo elemento para analizar es la demanda, hay que tener en cuenta que cualquier planificación o pronostico previo a la disrupción actual, ya no es válido. Además, dependiendo del tipo de negocio, parte de la demanda cambiará a canales on-line así que será necesario mantener una visión integrada del inventario y redistribuirlo por tipo de canal.

El tercer y último bloque corresponde a los procesos internos de la cadena de suministro, es decir la gestión del inventario, capacidad, planificación, producción, etc. Todos ellos deberán ser analizados en detalle para poder identificar riesgos y ser modelados en la siguiente iniciativa.

  1. Desarrollar escenarios para su cadena de suministro en función de la expansión actual y previsible del CoVid-19 y alinearlos con los planes de producción, de inventario y logísticos.

El primer paso será el de identificar posibles comportamientos sobre el avance de CoVid-19 en las regiones relacionadas con las cadenas de suministro de su empresa y evaluar la probabilidad relativa de ocurrencia.

El siguiente paso consistirá en modelizar dichos comportamientos e incorporar las diferentes variables de la cadena de suministro de su empresa, incorporando posibles soluciones a los riesgos identificados en el anterior bloque, con el fin de generar escenarios que puedan servir como base para la toma de decisiones.

Finalmente, se deberá alinear los principales elementos operativos de la empresa (planes de producción, aprovisionamiento, inventario, etc.) con el resultado de los escenarios generados. Es importante recordar, que este proceso tiene que ser dinámico y recurrente en función del comportamiento del CoVid-19

  1. Asegurar el Flujo de caja

Una de las mayores preocupaciones de la empresa durante las próximas semanas, sin duda, será garantizar la liquidez. Por lo tanto, es posible que sea necesario recurrir a nuevas fuentes de liquidez y/o reducir de una forma mas o menos drástica el gasto, utilizando las herramientas habituales y sobre todo las que facilite el gobierno para ello (líneas de crédito, reducciones fiscales, ERTE’s, etc.) Finalmente, si la empresa está asegurada contra la interrupción de la cadena de suministro, comience a ejercer esa política según sea necesario.

En cualquier caso, hay que tener en cuenta que nos recuperaremos. Así que también es necesario prepararse para el “reactivación” en donde la comunicación y la colaboración entre los diferentes actores de la cadena volverán a ser vitales. A medida que se reinicien las cadenas de suministro, se deberán establecer prioridades y trabajar lo más rápido posible para volver a sincronizar la oferta con la demanda.

Accede a nuestro e-book especializado:

COVID-19: Cómo responder de manera rápida y eficiente a las interrupciones de la cadena de suministro

DESCARGAR E-BOOK