LA INFLACIÓN Y LOS PRECIOS DE TRANSFERENCIA

LA INFLACIÓN Y LOS PRECIOS DE TRANSFERENCIA

La inflación es un fenómeno monetario difícilmente controlable (a veces imprevisible) que a lo largo de los años, y particularmente en ciertos periodos de la historia, ha causado estragos en muchas economías del mundo y la española no es una excepción. Ya entrando en abril, el Banco de España ha publicado la tasa de marzo en la que se ha alcanzado la cota del 9,8% (algo insólito desde la década de los 80) evidenciando el riesgo al que se enfrenta nuestra economía. Pero España no es la excepción, otras economías europeas también están empezando a presentar datos preocupantes tal y como se muestra en la siguiente tabla publicada por Eurostat el pasado 1 de abril:

Según publica esta misma fuente, dentro de los componentes con los que se construye el IPC (indicador de variaciones de precios en España, la HICP – Harmonized Indices of Consumer Prices - en europa), la energía está jugando un papel muy destacado tal y como se puede apreciar en el gráfico que se incluye más abajo. Mientras que el resto de componentes (Services, Food, alcohol & tobacco, and Non-energy industrial goods) se mueven en figuras “razonables”, la energía (Energy) está disparada. Históricamente ha sido la variable más volátil, pero desde principios del 2021 está completamente desatada.

Este aumento en los precios se veía venir desde el 2020 tras los confinamientos, el cierre de los mercados y la interrupción en las cadenas de suministros provocadas por el COVID-19 que en muchos casos se alargaron hasta bien entrado el 2021, y que sin duda se han visto acrecentados dadas las circunstancias geopolíticas que estamos atravesando, lastrando el optimismo con el que se cerró el ejercicio anterior.

Desde el punto de vista empresarial, los modelos de negocio de Grupos Multinacionales, y especialmente aquellos cuyas actividades estratégicas estén muy ligadas al precio de la energía: fabricantes, entidades extractivas, distribuidoras, circuitos logísticos, etc., podrían sucumbir a esta presión inflacionaria, si no se toman las medidas preventivas necesarias para flexibilizar dichos modelos y hacerlos menos dependientes.

Fiscalmente hablando, los efectos de la inflación sobre la cadena de valor del Grupo pueden dar lugar a inconsistencias financieras (i.e. rentabilidad) y de control que, a su vez, deriven en situaciones de riesgo frente a Hacienda. Por ello, es importante que en las reuniones de Planificación de este ejercicio se tenga en cuenta el impacto de la inflación sobre la estructura de costes del Grupo y cómo debieran ser asignados dichos costes, si procede, entre las entidades del Grupo o también valorar qué entidades deben asumir los riesgos derivados de esta coyuntura económica de acuerdo con los perfiles funcionales coexistentes.

En lo que respecta a las operaciones financieras intragrupo, los efectos también pueden ser devastadores si no se realiza un ejercicio de prevención, planificación y control. Es de sobra conocido que los tipos de interés y los tipos de cambios están estrechamente ligados a la inflación pudiendo afectar directamente a la rentabilidad y estructura de financiación de las empresas. Por ejemplo, una subida de tipos de interés podría dificultar la capacidad de repago de muchos prestatarios o provocarles una situación de desequilibrio patrimonial o de sobreendeudamiento.

A continuación, enumeramos algunas cuestiones adicionales a tener en cuenta en materia de Precios de Transferencia:

  1. Revisión de los contratos con partes vinculadas e independientes: Revisar si el marco recoge cláusulas sobre los efectos de la inflación y si se determina quién debe hacerse cargo.
  2. Especial cuidado con los perfiles de riesgo limitado (fabricantes y distribuidoras): Evitar traspasar/asumir cualquier coste (financiero o no) que no esté en línea con el perfil funcional otorgado a la entidad. Cualquier ajuste o refacturación debería estar motivado en una reestructuración tomando en cuenta lo establecido en los trabajos de BEPS, e incluso tomar en cuenta el efecto de BEPS 2.0
  3. Monitorización de partidas contables clave con partes independientes e incluirlas en el cambio de flujos: A diferencia de una reestructuración que afecte sólo a funciones en el marco de acción de partes vinculadas, es recomendable identificar la interacción con partes independientes y adaptar el modelo actual a nuevos modelos operativos que busquen diferenciar aún más el perfil funcional y justificar el perfil de riesgos.
  4. Revisión de la estructura financiera: Contrastar el efecto que podría tener una subida de tipos de interés sobre la estructura de financiación de las entidades del Grupo, así como sobre las financiaciones a tipo variable y/o multidivisa.
  5. Cumplimiento de políticas: Calcular el impacto sobre ventas y, por extensión, sobre el margen el cumplimiento de las políticas de precios de transferencia preestablecidas y corroborar si los resultados pueden crear dificultades de evaluación comparativa en relación con los datos de mercado existentes.
  6. Ajustes de comparabilidad por inflación: Las empresas deberán ajustar sus comparables para tener en cuenta la tasa de inflación.

Todas estas cuestiones suponen un reto nada trivial para todos los Grupos españoles que en momentos de incertidumbre como los que acontecen, blindan su capital reduciendo la inversión y el gasto; no obstante, no hay peor escenario que sufrir una Inspección de Precios de Transferencia sin haber hecho los deberes. Porque desde hace tiempo ya no solo vale con hacer, es necesario demostrar.

Aún está por ver que camino decide tomar la Administración para abordar estas cuestiones. La verdad es que si se acude a artículos de prensa recientemente publicados por algunos de los periódicos de referencia del país sobre la materia y en el que se dice que: “hay preocupación en la Agencia Tributaria a que las compañías aprovechen este escenario para aumentar el valor de las compras y ventas entre firmas del grupo por eficiencia fiscal entre los países en los que opera, el futuro no es muy esperanzador que digamos.

En suma, resulta vital incluir dentro los Planes Estratégicos del 2022 (y siguientes) realizar un ejercicio de prevención, planificación y control sobre la inflación y los Precios de Transferencia y, en su caso, rediseñar un nuevo sistema de remuneración sólido y consistente que sirva como defensa ante una eventual Inspección.

Desde BDO España, estaremos encantado de ayudaros en este proceso y ponemos a vuestra disposición todos nuestros conocimientos y herramientas. Como BDO Global portal, una solución eficiente, escalable y segura. Pueden inscribirse en una sesión de trabajo específica en el siguiente enlace: 

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